domingo, 16 de octubre de 2011

Anécdotas del super clásico.




                                                                        Por Emmanuell Ibarra Solís

Tuve la oportunidad de leer un libro argentino, inspirado en el máximo duelo fraternal de todo el continente el River Plate vs Boca Jrs.  El escritor Alfredo Luis Di Salvo comparte el testimonio de varios ex –jugadores que tuvieron acción en estos duelos, donde comparte un testimonio con el que me quedo es del señor campeón del mundo, Daniel Passarella.

Daniel, comenta acerca del derby regio Monterrey-Tigres, que para él que tuvo la oportunidad de vivirlo, se le asimila en la pasión y en la rivalidad al clásico de Argentina. Cuenta como lo vivía previamente, durante y después, para que un campeón del mundo venga a la ciudad y en un libro comente que el clásico regio es apasionante e incluso igual o mejor que el mejor del continente, es porque este partido tiene un condimento especial a diferencia de los demás clásicos de la región. 

Muchos influeciados por las televisoras, otros llamados clásicos y la gente no se toma la molestia de tomarlo como tal, el clásico en Monterrey es uno de los que sobreviven con la pasión y entrega de siempre desde sus primeros duelos fraternales.

Me quedo de igual manera con una de las muchas frases que Daniel arrojó después de perder el clásico del Apertura 2003 por marcador de 3-2, un periodista decía que si con ese marcador Tigres ya cobraba venganza por la semifinal que Monterrey le ganó a Tigres y responde: “Tigres podrá ganar mil clásicos, pero Monterrey ganó los más importantes de la historia”.

De igual manera, Tigres en su oportunidad cuando Miguel Herrera tomó el mando del equipo de Monterrey, lanzó una alerta al cuadro felino el cual lo goleó 6-2 cerrando la boca al nuevo timonel rayado.  Nunca acabaríamos de contar todo lo que rodea a este partido, hoy estamos a una semana del encuentro aquí no vemos los tres puntos, si se jugo bien, un clásico se gana desde el bolado diría Ángel Labruna, aquí más que fútbol se pide corazón.

Entre carne asada, cerveza y amigos, se paraliza la ciudad, se llega el Monterrey-Tigres. 


No hay comentarios:

Publicar un comentario